domingo, 13 de abril de 2014

Un Sueño. Parte II

Cerré los ojos y en ese momento sentí como alguien me agarraba del brazo y me halaba. Caminé detrás de esta persona y escuché sonidos muy extraños desde que comencé esta caminata, parecían melodías de alguna agrupación post-moderna y experimental, era una música extraña que no la podía relacionar con nada más, si es que se le podría llamar música, porque no parecía ser una canción ni nada parecido. 3 segundos de estos sonidos, seguidos por un par de minutos de un silencio eterno, y allí irrumpían otra vez algunos segundos de dichos sonidos. Me estaba alterando no poder saber que era lo que producía estos sonidos, así que consideré abrir mis ojos. En ese momento me di cuenta que mis ojos ya estaban abiertos. No podía identificar cuando los tenía cerrados o abiertos a menos que me llevara mi otra mano a la cara. La oscuridad, o mi sombra, todavía eran dueños del entorno en donde estábamos la extraña persona que me guiaba y yo. Eso también me comenzó a alterar, más al saber que llevaba unos 30 minutos caminando.

De un momento a otro aquella persona me soltó el brazo y dejé de sentir su presencia a mi alrededor. Lo que seguí sintiendo era la presencia de mis pensamientos, pero ya no los podía ver. Estaba absorto sin saber que hacer. Comencé a gritar con el afán de encontrar un interlocutor que me dijera como debía proseguir. ¿Debía esperar? ¿O caminar en alguna dirección? si era así, ¿En qué dirección y por cuánto tiempo? Demasiadas preguntas que no encontraban respuesta, en parte por la complicidad de la oscuridad en que estaba inmerso, de la misma oscuridad que me tranquilizaba antes, todo porque la tenía controlada (o al menos eso pensaba yo.).

Me pareció ver un destello de luz a unos metros de distancia. Al mismo instante se escuchaban aquellos extraños sonidos de antes. Después de analizar un poco la situación comprendí que estos destellos de luz eran producidos por una sonrisa extremadamente blanca, y que lo que escuchaba eran unos sonidos producidos por esa boca. Parecía ser que tal melodía era una especie de lenguaje. Caminé hacia ese destello lumínico, con esperanzas de alcanzarlo y aferrarme a él hasta que pudiera salir de aquella oscuridad que me tenía preso con mis pensamientos más malvados. Al alcanzar a esta persona descubrí que era ella, la culpable de que me hubiera negado soñar por tanto tiempo. al acercarme a ella pude entender que me decía en aquel singular lenguaje: "Olvido".

Di media vuelta y comencé a correr durante varios minutos, después de correr por unos 5 kilómetros comencé a ver como la oscuridad acababa y una tenue claridad se vislumbraba en el horizonte, así mismo sentía como la presencia de mis pensamientos malvados desaparecía.

"Olvido" era lo que ella había dicho, así había entendido como la oscuridad era sinónimo de olvidar y la manera más cobarde de terminar con un amor. Dejé de soñar para no recordarla, pero olvidar solo me había traído oscuridad rodeada de aquellos pensamientos rencorosos y vengativos. Recordar aquellos momentos que hicieron que la amara eran los que me iban a traer la tranquilidad y podrían alejar las tinieblas en que había convertido mi mente.

viernes, 28 de marzo de 2014

Un sueño. Parte I.

Llego a este punto decidido a acabar la dictadura que me auto-impuse por culpa de un amor que no fue tal, me permitiré soñar una vez más. ¿Pero que es un sueño? ¿Un mundo que nos creamos con base en los ideales planteados por una sociedad que cada día es más banal?
Esta es la historia de mi sueño, el primer sueño que tuve después de que aquella dictadura cayera en manos de la revolución de mis recuerdos, esos recuerdos de lo que era bello e imperfecto:
Recuerdo unos gritos fuertes y punzantes como solo la muerte o el nacimiento de una persona los pudiera producir, su emisor era mi sombra, que preocupada y desesperada gritaba a más no poder. Solo la oía, no podía ver a mi fiel acompañante, a ella ni a nadie más.
Era todo oscuridad, mi sombra había desaparecido, o quizá se habría vuelto en el todo de aquella situación, habría mutado a algo más que sombra.
Sin saber que había pasado con ella, comencé a estudiar la situación, la ausencia de luz en cualquier otro momento me habría traído desesperación y desolación; y ahora, en ese preciso momento, encontraba tranquilidad, entre otras cosas porque me sentía puro y desnudo al frente de mis pensamientos, a los que por primera vez tenía frente a mi. Pero había algo extraño, no estaban todos los pensamientos, solo algunos, solo los más perversos pensamientos que había tenido alguna vez.
¿Qué le dice uno a pensamientos que nos han atormentado durante tanto tiempo?. Todavía no lo sé...
Solo los observé, los imaginé en diferentes contextos: en la playa, en una jaula con animales salvajes, en una fiesta con las drogas de última moda... los imaginé en todos los contextos que para mi era posible imaginarlos, y aún así no encontré como dirigirme hacia ellos. Ellos tampoco se dirigieron hacia mí.
En ese momento, en que perdí total esperanza por comunicarme con ellos, cerré mis ojos...





lunes, 3 de marzo de 2014

Solo por huir

El viento feroz arrancaba de su tallo algunos pétalos, los cuales con desidia iban rumbo al suelo en donde yacía reflexivo X100 V1, el último robot que había salido al mercado y que había sido adquirido por Lucrecia.
Lu, como le decían sus amigas, se encontraba desesperada en ese mismo instante tratando de localizar a X100 V1. Nadie le daba razón de donde estaba; y es que su robot, del que había caído enamorada perdidamente, había escapado.

La última vez que X100 V1 sintió algo parecido a lo que sentía en ese instante, mientras los pétalos le rozaban su cráneo amorfo, era en medio de un sueño que tuvo tres meses atrás. Ese había sido su primer y único sueño y a la vez, el único momento, hasta ese día, en donde sentimientos intensos habían invadido la lógica racional en la que se basaba su existencia.

X100 V1 reflexionaba después de una maratónica huída, y es que Lu le había confesado sus sentimientos y él se daba cuenta de que lo que pasaba en su frío cuerpo se podía asemejar a lo que su dueña llamaba amor. Sin poder entender nada de lo que sucedía escapar parecía la mejor opción, pero en ese instante solo en los campos, observó como el viento de tanto huir solo dañaba flores hermosas y todo para seguir viajando sin rumbo fijo y sin un porque. Solo por huir.




martes, 31 de diciembre de 2013

La ilusión

Su mejor amigo le decía constantemente que no se ilusionara más con la posibilidad de estar de nuevo con ella. Había pasado una decena de meses desde que ella creyó acabarle tales ilusiones, sin embargo día tras día él seguía pensando en ella, imaginando un futuro cercano rodeado de felicidad al lado de quién un año antes le había aceptado matrimonio.
El llegó a una conclusión un tanto mediocre, pues la única respuesta válida para él a la condición obsesiva que tenía, era que el no estaba ilusionado sino que la ilusión lo había tomado prisionero.
10 millones de recompensa llegó a ofrecer por capturar a esa desalmada opresora, a la ilusión.
Un día, después de varias semanas de infructuosa espera, su teléfono hizo un sonido agudo en señal de la urgencia de la llamada que iba a hospedar.
- ¿Quién es? - dijo apenas levantó el auricular.
- No importa quien soy, lo que importa es que la encontramos. Estaba vagando por los bares de la zona naranja y estaba muy tomada.
- ¿A quién encontraron? ¿a la ilusión?
- Si. Pero antes de entregársela  debemos hablar de la recompensa.
- Por supuesto. Les daré el dinero en el momento de la entrega.
Después de acordar los detalles para la entrega, él se puso su mejor ropa para acudir al encuentro con quién le habría de causar tanto daño en los meses pasados.
En el lugar acordado él se encontraba a la hora acordada y vio a dos sujetos que sostenían a una mujer de casi 30 años que se notaba muy golpeada por el desespero.
- ¡Esa es! - se dijo así mismo.
Se levantó, se dirigió hacia estos sujetos y les dijo: "Acá está todo el dinero". Acto seguido les lanzó una bolsa llena de billetes.
Los sujetos abrieron la bolsa y después de comprobar que estaba el dinero acordado arrojaron a la mujer a los brazos de él.
La miró a los ojos unos segundos y por fin comprendió.
Él no estaba secuestrado por la ilusión, tampoco estaba teniendo caprichos cada que se imaginaba un futuro al lado de su ex. Lo que ocurría es que ambos habían caído profundamente enamorados. Tanto la ilusión como él habían encontrado el amor y él continuaría el resto de su vida ilusionándose. 

domingo, 22 de septiembre de 2013

La sombría realidad

Y una noche surgió aquella pequeña rebelión. Quizá surgió porque se cansó de repetir las acciones de su poseedor, que de por sí eran unos actos horrorosos que le habían hecho merecer los más alarmantes calificativos por parte de la sociedad: "El monstruo del parque", "el diablo negro", "el fantasma oscuro".
Era un moreno de alta estatura al que se le acusaba de haber matado a más de diez personas cuando cruzaban distintos parques en una gran metrópoli. Debía ser por la perfección macabra con la que realizaba sus actos y por algo de incompetencia policial que dicho asesino siempre gozaba de una tranquilidad monumental. Sin embargo alguien se cansó de que eso siguiera pasando, y salió del anonimato acompañada de un cuchillo para acribillar a "El monstruo del parque". Ahora, la incompetente policía se enorgullece de hallar el cadáver de ese trofeo, mientras que la sombra disfruta de su libertad planeando como seguir el trabajo de su antiguo poseedor, pero a su manera.

jueves, 7 de marzo de 2013

Coleccionador de Microcuentos.

Algunos microcuentos que me ha gustado escribir desde el pasado septiembre.


1. Su sombra lo odiaba en silencio, en un silencio que carecía de sombra.
2. You are the trigger of my mind and the bullet in my heart.
3. ... y los títeres manejaban al titiritero a su antojo, así como las letras dominaban al escritor...
4. Se durmió deseando un mundo mejor y nunca despertó.
5. Y condenaron de muerte a la donadora de esperanzas... Solo tengo para decir que fue un juicio más que justo.
6. Era muy tarde, ya sus venas estaban emanando tanta sangre como las armas emanan muerte.
7. Era un imaginario real, es decir, una ilusión que era consciente de ser ilusoria.
8. Hasta que el amor le dio una patada en las guebas al 'pero'.
9. Él tenía un as bajo la manga para conquistarla, ese día, lastimosamente, su camisa no tenía mangas.
10. Anduvo aturdido por el estallido de ese amor. De ese momento en adelante lo único que escuchó fue la música del sexo.
11. Tenía tres historias que contar cuando murió. Ellas, huérfanas, murieron sin que ni siquiera el olvido las conociera.
12. Estaba lloviendo tan duro que el sol y la luna se fueron a escampar y nunca volvieron.
13. Terminó siendo un pedazo de olvido, sin otra alternativa que aparecerse, de vez en cuando, en las pesadillas.
14. El lunático lunar no dejaba de preguntar si a la luna lo iban a llevar.
15. Ella no quería una vida de viuda, por lo que hizo que la viudez los tomara a los dos a la misma vez.
16. La convicción lo llevó a ser el mejor convicto de la cárcel.
17. A ella no le gustaban los expresos, prefería los cafés que siempre habían sido legales.


















sábado, 9 de febrero de 2013

Etéreo Momento.

Nuestra historia terminó de manera trágica, debido a que no comenzó.

Él la amó hasta más no poder, la observó y la besó, en sueños claro está. Su obsesión no terminaba en el despertar, sino que además se manifestaba en la muerte del dormir.

Vivir para un ideal era su destino, y aunque los ideales no están para cumplirse, su frustración al no conseguirlo lo llevó a matar a ese sueño que lo había acompañado tan lealmente.

El sueño se le manifestaría en medio de una pesadilla, le diría que el error que había cometido lo pagaría caro, que la puerta de la muerte lo llevaría a donde van las sombras, a una eternidad momentánea que le haría admirar durante mucho tiempo, el paso de un segundo.